Pionero en la promoción de un desarme extendido de la población civil, Gabriel Conte, director de la organización no gubernamental mendocina Espacios, integrante de la Red Internacional de Acción contra las Armas Pequeñas (Iansa), tiene una certeza en torno de la tragedia de Carmen de Patagones: «Más allá de las motivaciones, una cosa es clara, y es que este chico tuvo un arma al alcance de la mano y eso le permitió matar».

Conte había llegado anteanoche de Estocolmo, donde representó a las ong pro desarme en una conferencia ante el Parlamento de Suecia para reclamar acciones de los gobiernos para la erradicación de las armas pequeñas.

«Esto pone en evidencia, una vez más, qué pasa cuando se tiene un arma cerca. Obliga a nuestros legisladores y autoridades a ocuparse en forma urgente de este tema, a discutir seriamente si las armas deben o no estar al alcance de civiles. Al mismo tiempo, obliga a controlar qué rigurosidad tienen en el cuidado de sus armas aquellos que trabajan profesionalmente con ellas», dijo Conte a LA NACION.

El director de Espacios, que integra la Red Solidaria, apoya sus argumentos por el desarme con inquietantes datos estadísticos: en nuestro país un millón y medio de chicos viven en hogares donde hay armas, la mitad de las cuales están cargadas y listas para usar, y cada día de los últimos dos años un menor de 24 años resultó muerto por balas.

Según datos del Renar, hay 2.200.000 armas registradas; según estimaciones de la ONU, en la Argentina existen otras 900.000 sin registrar.

«Pero debemos tener en claro una cosa: las armas matan, sean legales o ilegales; por eso la discusión es la de tener o no tener armas. Que la gente compre armas y las tenga en su casa es un problema. Las estimaciones indican que habría 700.000 familias en posesión de armas, y las estadísticas indican que al defenderse de un asalto con ellas aumenta en un 300% la posibilidad de morir en ese hecho», sostiene Conte.

Al cierre de esta edición, la directora de Iansa, la inglesa Rebecca Peters, habló desde Londres con LA NACION: «Estoy consternada. Este es un día muy triste. No puedo más que lamentar estos asesinatos y enviar mi solidaridad a los familiares y amigos tanto de las víctimas como del muchacho que ha causado esta tragedia, que seguramente también estarán destruidos».

«Siempre tenemos la esperanza de que hechos como éste no sucedan en un país democrático y estable como el vuestro. Este es un incidente que solemos asociar con países donde hay armas en la mayoría de las casas, como los Estados Unidos. Y nos recuerda el peligro que sobreviene cuando la gente tiene armas en sus hogares», sostuvo Peters.

Emociones

  • A Rebecca Peters, máxima referente de la red mundial pro-desarme Iansa, la noticia de la matanza en Carmen de Patagones la remitió a la masacre de Littleton, Estados Unidos, cuando dos chicos armados mataron a 12 compañeros de la escuela Columbine: «Los adolescentes sienten emociones fuertes, intensas, y a veces violentas, cuando tienen muchos problemas. No debemos poner armas a su alcance», dijo.

Conmoción por la masacre Di Rocco

  • «La jueza decidirá el lugar donde permanecerá alojado definitivamente, si será un instituto correccional y el tiempo que pasará allí»

Curetti

  • «Es un hecho desgraciado. Este chico había tenido una atención del gabinete psicológico en alguna ocasión, vinculada con su timidez»

Columbine

  • El vocero de la Columbine High School, Rick Cosmun, donde dos alumnos mataron a 12 personas, aconsejó a la gente de Carmen de Patagones: ?Hay que volver a la escuela cuanto antes, aunque sea doloroso y todo el mundo esté dolorido y extrañado?.

Manson

  • El chico escuchaba música de Marilyn Manson, que muestra un desprecio por la vida en la mayoría de las letras que canta.

Filmus

  • «Tragedias así ponen en discusión en qué sociedad vivimos, para qué sociedad educamos, qué vínculos sociales nos proponemos generar».

Frases

  • En su banco, el homicida había escrito: ?La mentira es la base de la felicidad de los hombres?, ?Si alguien le encontró sentido a la vida, por favor escríbalo acá? y ?Lo más sensato que podemos hacer los seres humanos es suicidarnos?.

LA NACION